Abordamos la parte del Plan de Actuación de una Fundación desde donde se informa de la previsión de los recursos económicos a emplear, es decir, del presupuesto de sus gastos para cada actividad.

El cuadro del Plan de Actuación sigue la estructura de la Cuenta de Resultados. En la imagen vemos los tipos de gastos y en qué cuenta contable está recogida.

Veamos qué se recogen en las principales partidas. Hablamos del Plan de Actuación de una Fundación, pero las definiciones son válidas para la contabilidad de una asociación sin ánimo de lucro:

Gastos por ayudas y otros

Ayudas monetarias (650) y no monetarias (651).

Gastos por ayudas concedidas a personas, familias, entidades…derivadas del cumplimiento de los fines de la actividad propia de la organización no lucrativa. También recoge prestaciones realizadas en régimen concertado a través de entidades ajenas a la Fundación, lo que en Cooperación se llaman “contrapartes”.

Es conveniente desglosar esta cuenta a cuatro cifras para recoger los diferentes tipos de ayudas: Personas, Entidades, Contrapartes, Cooperación….Ejemplos de gastos: subsidios, becas, premios, cooperación internacional, Ayuda Humanitaria, ayudas para gastos de alimentos/ropa/alquiler a familias sin recursos, etc.

Gastos por colaboraciones (653) y órganos de gobierno (654)

La cuenta 653 recoge las cantidades por compensación de gastos por prestaciones de colaboración producidos por el voluntariado y otras personas colaboradoras como consecuencia de las actividades desarrolladas en la Fundación. Ejemplos: gastos de transporte, comida y vestuario. ¡Cuidado con utilizarlo como una remuneración! Estamos hablando de voluntariado.

En la cuenta 654 registraremos los reembolsos de gastos al órgano de gobierno, es decir, cantidades que se entregan a sus miembros como consecuencia del reintegro de unos gastos, debidamente justificados, producidos por el desempeño de sus funciones. De nuevo, cuidado con utilizarlo como remuneración.

Otros gastos de la actividad de la Fundación o Asociación

Siguiendo el Plan General de Contabilidad adaptado a las organizaciones sin ánimo de lucro, tendríamos el grupo 62: SERVICIOS EXTERIORES, desglosado en:

  1. Gastos en investigación y desarrollo del ejercicio.
  2. Arrendamientos y cánones.
  3. Reparaciones y conservación.
  4. Servicios de profesionales independientes.
  5. Transportes.
  6. Primas de seguros.
  7. Servicios bancarios y similares.
  8. Publicidad, propaganda y relaciones públicas.
  9. Suministros.
  10. Otros servicios

Que a su vez puede dividirse en tantos grupos de gastos queramos controlar: Material de Oficina; Transporte, alojamiento y manutención; Imprenta;

Recursos no imputados a las actividades

Nos encontramos aquí con un rubro “conflictivo”.

No hay duda en que aquí irían los gastos generados por la administración y gestión de un fondo de inversión, por ejemplo, pero nos ha llegado requerimiento del Protectorado obligando a ubicar aquí las comisiones bancarias provocadas por transferencias internacionales en las que se enviaban las ayudas monetarias a la contraparte. ¿En base a qué criterio?, no sabemos porque con otras Fundaciones no nos han dicho nada. En fin… creemos que los gastos de estructura (departamento de administración, gestoría, amortización, etc.) son costes indirectos a la actividad, es decir, necesarios para desarrollar la misma y, por tanto, imputables proporcionalmente a cada actividad en función a un criterio de reparto “objetivo”. No obstante, no debemos despistarnos por estas cuestiones, más o menos, burocráticas. El objetivo es gestionar mejor nuestros recursos y quién mejor sabe en qué se aplican es la propia organización, más allá de que nos hagan ubicarlo en un sitio u otro.

En el siguiente post terminaremos el repaso al Plan de Actuación de una Fundación hablando de los ingresos.